La palabra enredada en los surcos de una habitación clara; apacible y hasta sensata, siempre será implacable... Implacable en lo citadino, en la política y en el amor.... A ella le va este tapujo: a ver si se demora; a ver si se apacigua; a ver si se desvanece en la leve persistencia de nuestra memoria...
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miércoles, 21 de abril de 2010
jueves, 15 de abril de 2010
Sonidos subterráneos
Eran las seis de la tarde y el vagón estaba a reventar. Thelma y Louise entran tomadas de la mano y el apretón acostumbrado, viaje tras viaje, les da la señal para sumergirse en el ruidoso murmullo de sonidos, voces y calor que las transforma en las “musiquitas” del subterráneo.
Guitarra y flauta en mano, buscan un espacio sin entorpecer el cansancio de la gente. Hay, además, sudor y caras llenas de incordio; no por ellas, sino por el peso del día que aún no acaba y que parece estirarse a lo largo de las vías que aun tienen que recorrer para llegar a casa.
La pieza termina – como todas - en la siguiente estación, con el aplauso indiferente y cómplice de siempre y con el paseo agradecido para sumar algunas monedas a la jornada. Jornada que para ellas, apenas comienza.
Narra la declaración de Thelma, en la estación de policía, que Louise estaba con el sombrerito de vuelo corto recogiendo las propinas cuando comenzó la aireada discusión con la señora bien vestida del asiento de enfrente.
- Pero señora, ¿por qué se pone así? Mil disculpas si la molesté...
- Perdóneme señora, pero no estoy de acuerdo con usted. Nosotras estamos estudiando y salimos a trabajar honestamente para sostenernos.
- ¿Y eso acaso es problema suyo? ¡Vieja entrometida! ¡El amor es libre! ¿Acaso usted es feliz? ¡No lo parece!
- ¿Qué? ¡No!, ¡se pasó vieja grosera!
La sangre goteaba del pómulo de la señora y la guitarra rota yacía en el piso. La gente, en medio del alboroto, tocó la alarma y entre varios hombres tomaron del brazo a Louise para entregarla.
Thelma sale de la comisaría muy entrada la noche; no le permitían permanecer allí acompañando a Louise y la echaron con brutalidad.
Ensimismada en su tristeza, camino a la pequeña habitación que comparten en una pensión del centro de la ciudad, se da cuenta que sin Louise el trabajo en el subterráneo, y su vida misma, se transforman en un solo de flauta.
Louise siempre fue la arrojada, y Thelma, la más insegura y frágil.
- Dios mío, ¿por qué? 72 horas de arresto y trabajo comunitario con presentación cada 3 días. ¡Que desastre! ¿Será que mañana lo intento? Nunca he tocado sola mi flauta en ese gentío. ¿Qué hago? ¿De algo tengo que comer?
Eran de nuevo las seis de la tarde, pero del día siguiente, y el reloj de Thelma no hacía otra cosa que girar sus agujas clavándolas en el pecho desolado de un amor que supura rabia e impotencia y a la vez suspira de impaciencia por su reencuentro.
El vagón era el mismo; la hora era la misma; las personas, tal vez, eran las mismas.
- ¡Fuera de aquí! ¡Fuera!
- No creas que hemos olvidado lo que pasó ayer con esa pobre señora.
- ¡Si, fuera!, ¡fuera!, vete con tu flauta y con tu violencia a otro vagón desgraciada...
Thelma sale a empujones del vagón. Llorando y desesperada, corre para dejar atrás los golpes tratando de recuperar el equilibrio, pero en su desazón tropieza con la escalera mecánica. La flauta destrozada, queda en el escalón que golpeó al caer.
Dos días más tarde, a la salida de su encierro, Louise regresa a la pensión con un dolor, que no llega a ser tal, en la boca del estómago; Son las 11 de la noche y, al entrar, llama a Thelma pero no la ve por ningún lado.
- Thelma, ¿dónde te metiste mi amor?
Louise espera y del silencio solitario rompe un llanto a medio camino entre la incertidumbre y la desesperanza. Sin fuerzas para seguir luchando, se dice a si misma y a una Thelma ausente:
- Prometo no confrontar nunca más a esta ciudad y a su gente absurda; allá ellos con su vida y con la manera como la entienden.
Al día siguiente, desesperada, decide ir a los hospitales. La hoja médica del deceso de Thelma dice: “fractura de cráneo en hueso occipital. Muerte instantánea”.
Louise en crisis, comienza a pasearse por los dos años de vida con Thelma y sólo consigue sonrisas, empeño, amor y ganas de vivir. Comprende que los sonidos subterráneos provienen de las almas enterradas bajo las infinitas capas de nuestra estupidez.
martes, 6 de abril de 2010
Silvio y su resumen de noticias...
Resumen de noticias es como el esparadrapo aquel que se cae debajo de la cama y solo consigues cuando buscas una alpargata... Y es que el alma solo consigue su esencia cuando quiere salir a bailar.
Con Silvio bailo a menudo sin permiso de esparadrapo ó de alpargata alguna, porque los ladrillos de un zapato jamás serán como el pana Silvio. El, sabe pisar; sabe trastabillar sin aspavientos; y, si aparecen, son como el agua clara que deja ver entre su impávida apariencia transparente, aquel hálito de esperanza y de sabor a vida, que solo una canción como esta, te sabe regalar...
Resumen de Noticias
He estado al alcance de todos los bolsillos
porque no cuesta nada mirarse para adentro.
He estado al alcance de todas la manos
que han querido tocar mi mano amigamente.
Pero, pobre de mí, no he estado con los presos
de su propia cabeza acomodada,
no he estado en los que ríen con sólo media risa,
los delimitadores de las primaveras.
No he estado en los archivos ni en las papelerías
y se me archiva en copias y no en originales.
No he estado en los mercados grandes de la palabra,
pero he dicho lo mío a tiempo y sonriente.
No he estado enumerando las manchas en el sol
pues sé que en una sola mancha cabe el mundo.
He procurado ser un gran mortificado
para, si mortifico, no vayan a acusarme.
Aunque se dice que me sobran enemigos,
todo el mundo me escucha bien quedo cuando canto.
Yo he preferido hablar de cosas imposibles
porque de lo posible se sabe demasiado.
He preferido el polvo así, sencillamente,
pues la palabra amor aún me suena hueco.
He preferido un golpe así, de vez en cuando,
porque la inmunidad me carcome los huesos.
Agradezco la participación de todos
los que colaboraron en esta melodía.
Se debe subrayar la importante tarea
de los perseguidores de cualquier nacimiento.
Si alguien que me escucha se viera retratado,
sépase que se hace con ese destino.
Cualquier reclamación que sea sin membretes.
Buenas noches, amigos y enemigos.
viernes, 2 de abril de 2010
¿Me regala un "tweet" que se entienda?...
Pemítanme la temeridad de increpar formalmente el destino del Twitter tal y como se viene usando en estos últimos meses en nuestro país.
El Twitter comenzó a mutar a lo inentendible y a lo desagradable...
En este estadio político y, sobre todo económico que nos ocupa, el Twitter pasó de ser la referencia obligada para informarse, a la referencia negada para el chisme y el enredo...
El objetivo de esta valiosa herramienta comunicacional virtual de masas, es abrir espacios de información y de opiniones rápidas, pero de mensajes que transmitan y no que confundan...
Un ejemplo:
Twitero1 La revolución de Yoany, el negro Zapata, las Damas de Blanco RT @Twittero2: Y no se detendrá RT @Twittero3: (cont) http://tl.gd/n5dsd
Este tipo de mensajes están multiplicados por millones en nuestra red y no sé, pero yo entendí lo que quiso decir el twitero1, el twittero2 y el twittero 3, luego de hacer un ejercicio de ilación a la inversa que me enredó y me molestó.
Queda el sinsabor de un mensaje que manejó códigos que no son fácilmente entendibles y que terminan siendo un juego para personas que tienen la posibilidad de estar pegados al Blackberry ó al Windows Mobile con acceso a internet ó al navegador de internet desde su casa u oficina, todo el día...
El comunicador (reza la teoría básica de la comunicación) es el responsable de que el mensaje que emite llegue con claridad al que lo escucha, lo lee ó lo ve...
El Twitter está hecho para que, al final del día, entres en los "Tweets" de las personas favoritas a las que sigues, y logres hilvanar una idea quedándote claro el tema que marcó el día.
Hoy, los "twitteros" perdieron esa esencia de comunicar un mensaje, ya sea para informar o para opinar y se permiten estas ligerezas y otras que ya rayan en lo irresponsable con el lenguaje. Comenzamos a ver a periodistas, escritores, politólogos, sicólogos, médicos, etc..., mutilando las palabras en la infame pelea de escribir en 140 caracteres algo que tenga sentido.
No comprendo bien el afán de "twittear" a razón de "tweets" por minuto... ¿De que se trata el asunto? ¿De estadísticas de mensajes o de la calidad y del alcance de los mismos?
Jack Dorsey - el creador del Twitter - lo dejó en el aire hace poco en una entrevista al referirse al giro no planificado que estaba dando el servicio por el tipo uso que la gente le estaba dando.
Por supuesto, esta es una herramienta libre y que cada quien usa y disfruta como le da la gana, pero, en mi humilde opinión, de seguir así, se convertirá en un enredo de mensajes sin valor tal, que terminará en la historia como una excelente iniciativa que falló en su esencia...
jueves, 1 de abril de 2010
El matrimonio...
“El matrimonio es la unión de dos libertades que participan de la fiesta de la vida”... (Facundo Cabrial).
Facundo en esta frase encierra un abismo en una caja de fósforos, y me sirvió para escribirle estas líneas a una amiga que se casaba al día siguiente...
“Amiga, mi primer consejo es que no pierdas tu libertad en nombre de ese hombre que amas, pero tampoco le permitas a él, que la pierda por ti; esa es tu tarea; que él, haga la suya.
El matrimonio debe ser un ápice de libertad para ser y para crecer. Libertad para hacer lo que se quiere y se debe. El apoyo que se necesita del otro para lograrlo, depende de él; quedará en sus manos darlo...
Para que estas libertades se unan y se puedan ir de fiesta, solo hace falta una palabra (casi un cliché, por cierto), la cual se transforma en una decisión que cambia con el tiempo: Comunicarse en los acuerdos con entusiasmo y en los desacuerdos con firmeza, pero sin el arrebato adolescente de la descalificación.
El matrimonio es un hecho inédito que une a dos personas que tal vez ni se conocen, y que se abrazan en un sin fin de emociones que los empujan a conocerse. ¡Pero cuidado!, conocerse, ¡no es suficiente!... es sólo la génesis de algo que también suena a cliché, pero que es vital: el respeto. Respeto por tus convicciones, por tus valores y por tus principios.
EL matrimonio es un acto de unión, no de compromiso. El compromiso suprime la libertad porque inevitablemente te hará hacer cosas que no quieres. Es allí donde los valores y principios actúan a través de la comunicación y se impone la libertad de no hacer lo que no se quiere hacer y de abalanzarse sin pudor sobre lo que si se quiere hacer.
EL matrimonio es un acto en el cual, eventualmente, habrá que hacer concesiones. Que sólo sean para hacer más divertida la fiesta y para que las libertades salgan a bailar sin parar. Jamás permitas que la concesión que hagas, vulnere tus valores y tus principios; eso no te lo perdonarás.
EL matrimonio es una fiesta en la cual, los amigos son tus principales invitados. Ellos te harán reír de tus problemas y te darán el espacio que definitivamente tú pareja o tú familia no te pueden dar. Los amigos son eso: “la familia que escogemos entre extraños” (Rubén Blades...)
Mujer, hombre: disfruten su libertad; disfruten su fiesta y disfruten su amor. La vida es un tablón montado sobre unas balanzas que deben estar en equilibrio; sino se cae de coñazo (y disculpen lo coloquial)... Y, aunque ese coñazo, de vez en cuando es necesario y hasta sabroso, mejor es bailar, que caer...
Así es el matrimonio: un montón de cosas en equilibrio que solo la libertad puede mantener.
Amiga, en principio pensé en escribirte sobre lo que el hombre espera de la mujer; pero no me cuadró bien... Creo que lo importante es poner en justa dimensión, lo que esa unión necesita, tanto del hombre como de la mujer para sobrevivir a los avatares del tiempo, del afán del día a día y de la devastadora rutina que abruma con los años...
Tu amigo
Herbert"
miércoles, 31 de marzo de 2010
Mujer...
Mujer, hoy amanece claro, y contigo a cuestas. Cuando abres tus ojos ya estas allí: viva ante la necesidad de correr tras tu necesidad; tras tus ganas de crecer y dar todo de ti a los tuyos, y a los no tan tuyos también.
Mujer, el inicio de tu dia se vislumbra duro: siempre lo será y lo sabes. ¿Cómo sorteas ese camino empedrado? ¿Cómo lo logras? ¿Cómo haces para escabullirte de cada resquicio de luz entre piedra y piedra?
Ya sé, ¡creo saber cómo lo haces! Subes la mirada, y tus ojos, sólo ven al frente: sólo ven la luz al final del camino y sólo piensas en llegar sin importar como. ¿Sabes?, te admiro por eso; siempre lo haré...
Mujer, hoy transcurre tu día como todos: con sinsabores y con alegrías; con lágrimas y sonrisas; con miedos y arrojo digno a vencerlos. Cuando abres linderos no hay quien te detenga. Sigues allí, bregando sobre tu tiempo como si fuera el último en vivir....
Mujer, a esta hora tal vez tienes sueño; ¡estas cansada! Pero sabes, como nadie, que no puedes desmayar; que el dia no culmina aún. Que apenas se asoma a la mitad y aún quedan horas para seguir en lo tuyo. ¿Cómo lo logras? ¿Cómo haces mujer para sostener tu cansancio? ¿Cómo haces para franquear cada minuto faltante sin claudicar?
Ya sé, ¡tal vez creo saber cómo lo haces! Te observas a ti misma y te das valor: sumas terquedad a tu andar y eso, te da energía. ¡Ah!, se me olvidaba; en tu casa, hay alguien esperando. !Eso también te da fuerzas!... ¿Quién te espera? No importa, también le darás lo mejor de ti, y eso, también te motiva.
Mujer, hoy anochece con lentitud y cuando quieres posar tu cuerpo en el descanso, aún hay cosas que hacer. Cuando quieres cerrar tus ojos, tu entrega imbatible a la responsabilidad no te lo permite. Te mantienes allí: incólume ante el tiempo y a la adversidad...
El fin de tu día en desparpajo absoluto, no deja dudas de lo duro que fue. Por un tiempo sabes que será así; aunque sabes que puede cambiar y que depende de ti: de que sigas en lo tuyo, en vivir cada segundo como si las agujas del reloj fueran a detenerse. ¿Cómo lo logras? ¿Cómo haces mujer para permitirte perder tu vida sin darte cuenta? ¿Cómo te lo permites? ¿Cómo te lo permiten?...
Ya sé, ¡de esto si no me queda duda! ¡Ya sé como lo lograste!
Un día mujer, te sentaste frente al parque: el día era asoleado, de árboles de un verdor inclemente a lo citadino, al smog de nuestros días. Allí, en el banquito mejor arreglado; aquel que no esta roto y que te apoya en la espalda, decidiste hacerlo. Decidiste ser mujer; ser madre; ser abuela; ser trabajadora; ser vecina; ser familia; ser sociedad y, por sobre todas las cosas, ser honesta y de una ética infranqueable...
¡Claro mujer! Al tomar esa decisión, no puedes ser diferente...
No cambies tú esencia. Sigue siendo lo que eres con premeditación y alevosía. Pero propongo entender algo: la pareja se hace igual que las matemáticas; sumando uno más uno igual dos (no uno, como reza aquel mito del amor sin límites; que por cierto, ¡no existe!...) Dos, que sumando sus fuerzas siempre abrirán espacios para que cada quien haga lo que quiere y debe hacer, sin temor a perder al otro y sin pudor sobre el amor...
Esto hará de la dureza del trajín diario, un halito de esperanza al reencuentro de nuestro ser y de nuestros sueños...
Mujer, el inicio de tu dia se vislumbra duro: siempre lo será y lo sabes. ¿Cómo sorteas ese camino empedrado? ¿Cómo lo logras? ¿Cómo haces para escabullirte de cada resquicio de luz entre piedra y piedra?
Ya sé, ¡creo saber cómo lo haces! Subes la mirada, y tus ojos, sólo ven al frente: sólo ven la luz al final del camino y sólo piensas en llegar sin importar como. ¿Sabes?, te admiro por eso; siempre lo haré...
Mujer, hoy transcurre tu día como todos: con sinsabores y con alegrías; con lágrimas y sonrisas; con miedos y arrojo digno a vencerlos. Cuando abres linderos no hay quien te detenga. Sigues allí, bregando sobre tu tiempo como si fuera el último en vivir....
Mujer, a esta hora tal vez tienes sueño; ¡estas cansada! Pero sabes, como nadie, que no puedes desmayar; que el dia no culmina aún. Que apenas se asoma a la mitad y aún quedan horas para seguir en lo tuyo. ¿Cómo lo logras? ¿Cómo haces mujer para sostener tu cansancio? ¿Cómo haces para franquear cada minuto faltante sin claudicar?
Ya sé, ¡tal vez creo saber cómo lo haces! Te observas a ti misma y te das valor: sumas terquedad a tu andar y eso, te da energía. ¡Ah!, se me olvidaba; en tu casa, hay alguien esperando. !Eso también te da fuerzas!... ¿Quién te espera? No importa, también le darás lo mejor de ti, y eso, también te motiva.
Mujer, hoy anochece con lentitud y cuando quieres posar tu cuerpo en el descanso, aún hay cosas que hacer. Cuando quieres cerrar tus ojos, tu entrega imbatible a la responsabilidad no te lo permite. Te mantienes allí: incólume ante el tiempo y a la adversidad...
El fin de tu día en desparpajo absoluto, no deja dudas de lo duro que fue. Por un tiempo sabes que será así; aunque sabes que puede cambiar y que depende de ti: de que sigas en lo tuyo, en vivir cada segundo como si las agujas del reloj fueran a detenerse. ¿Cómo lo logras? ¿Cómo haces mujer para permitirte perder tu vida sin darte cuenta? ¿Cómo te lo permites? ¿Cómo te lo permiten?...
Ya sé, ¡de esto si no me queda duda! ¡Ya sé como lo lograste!
Un día mujer, te sentaste frente al parque: el día era asoleado, de árboles de un verdor inclemente a lo citadino, al smog de nuestros días. Allí, en el banquito mejor arreglado; aquel que no esta roto y que te apoya en la espalda, decidiste hacerlo. Decidiste ser mujer; ser madre; ser abuela; ser trabajadora; ser vecina; ser familia; ser sociedad y, por sobre todas las cosas, ser honesta y de una ética infranqueable...
¡Claro mujer! Al tomar esa decisión, no puedes ser diferente...
No cambies tú esencia. Sigue siendo lo que eres con premeditación y alevosía. Pero propongo entender algo: la pareja se hace igual que las matemáticas; sumando uno más uno igual dos (no uno, como reza aquel mito del amor sin límites; que por cierto, ¡no existe!...) Dos, que sumando sus fuerzas siempre abrirán espacios para que cada quien haga lo que quiere y debe hacer, sin temor a perder al otro y sin pudor sobre el amor...
Esto hará de la dureza del trajín diario, un halito de esperanza al reencuentro de nuestro ser y de nuestros sueños...
martes, 30 de marzo de 2010
Hoy me dejé de pendejadas...
Hoy decidí dejar de envíar correos con adjuntos a mis panas y a los conocidos y a los que no lo son tanto... Hoy, después de un largo tiempo de hacerlo, y de posponer mis desazones a este espacio del mundo que llaman blog, me dejé de pendejadas y le voy a echar pichón...
La "palabra implacable", como lo bauticé, no es más que un intento de rayar en mi conciencia y en la de las personas que osen leerlo, lo importante del rescate de la palabra en nuestros tiempos, pero también lo terrible en lo que podemos convertirla: en la sociedad; en la política; en la vida; en la familia...
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